El alargamiento coronario es un procedimiento quirúrgico periodontal que permite exponer una mayor superficie del diente mediante la remodelación del tejido gingival y, en algunos casos, del hueso alveolar subyacente. Esta técnica se utiliza tanto con fines estéticos como funcionales, mejorando la armonía de la sonrisa y facilitando ciertos tratamientos restauradores.
¿En qué consiste el alargamiento coronario?
Este procedimiento implica la eliminación controlada de una pequeña cantidad de encía y, si es necesario, de hueso alrededor de uno o varios dientes. El objetivo es aumentar la longitud de la corona clínica del diente, es decir, la parte visible del mismo. De esta manera, se consigue una sonrisa más equilibrada y se facilita la colocación de restauraciones dentales cuando hay caries o fracturas subgingivales.
Indicaciones del alargamiento coronario
El alargamiento coronario está indicado en diversas situaciones:
- Sonrisa gingival: Cuando al sonreír se muestra una cantidad excesiva de encía, afectando la estética facial.
- Caries subgingivales: Caries que se desarrollan por debajo de la línea de la encía, dificultando su tratamiento.
- Fracturas dentales: Dientes fracturados cerca de la encía que requieren exposición adicional para su restauración.
- Preparación para restauraciones: Necesidad de exponer más diente para colocar coronas, puentes o carillas adecuadamente.
Beneficios estéticos y funcionales
Además de mejorar la estética de la sonrisa, el alargamiento coronario ofrece beneficios funcionales:
- Facilita la higiene oral al eliminar bolsas periodontales y reducir la acumulación de placa.
- Permite una mejor adaptación de restauraciones dentales, aumentando su durabilidad.
- Evita tratamientos más invasivos, como extracciones o implantes, al conservar la estructura dental existente.
Procedimiento paso a paso
El alargamiento coronario se realiza en consulta bajo anestesia local y sigue los siguientes pasos:
- Evaluación clínica: Se examina la salud periodontal y se planifica el procedimiento.
- Incisión y levantamiento del colgajo: Se realiza una incisión en la encía y se separa del diente para acceder al hueso si es necesario.
- Remodelación del tejido: Se elimina el exceso de encía y, en algunos casos, se contornea el hueso alveolar.
- Suturas: Se reposiciona la encía y se sutura en su nueva ubicación.
- Seguimiento: Se programan visitas de control para asegurar una correcta cicatrización.
Comparativa: Antes y después del alargamiento coronario
| Aspecto | Antes | Después |
|---|---|---|
| Longitud de los dientes | Corta, con encía prominente | Proporcional y armoniosa |
| Visibilidad de la encía | Excesiva al sonreír | Reducción significativa |
| Facilidad para restauraciones | Limitada por encía y hueso | Mejorada, con mayor acceso |
Cuidados postoperatorios
Después del procedimiento, es importante seguir ciertas recomendaciones para asegurar una recuperación adecuada:
- Evitar alimentos duros o calientes durante los primeros días.
- Mantener una higiene oral meticulosa, siguiendo las indicaciones del odontólogo.
- Tomar la medicación prescrita para controlar el dolor y prevenir infecciones.
- Asistir a las citas de seguimiento para evaluar la cicatrización y retirar las suturas si es necesario.
